¿Cómo me puedo reinventar? ¿Y en qué?

simulando pavo realLa reinvención es el broche final a un proceso de cambio que se suele iniciarse con una crisis personal o profesional. Llegado ese momento culminante, no sólo se ha superado la fase emocional que generó la situación detonante (pérdida) sino que se ha aceptado y elaborado, consiguiendo capitalizarla como una oportunidad de transformación y crecimiento personal. Las dificultades iniciales para cambiar, de alguna manera, tienen que ver con el sentimiento de apego: a un ser querido, a la estabilidad laboral, al status quo, a la salud, a la libertad o a cualquier aspecto relevante a nivel existencial o espiritual –fe, vocación, realización, etc.-

En el entorno de crisis que estamos afrontando, se ha hablado mucho de reinvención profesional y de la necesidad de superar las emociones negativas que genera la pérdida de empleo (proceso de duelo), pero en este tipo de cuestiones, no siempre es fácil conseguir la claridad mental y la energía necesarias. Por eso, he querido escribir hoy sobre el tema y ofrecerte algunos consejos prácticos extraídos de mi propia experiencia:

1. Dejar salir las emociones, dándonos permiso para sentirlas. En caso de no conseguir canalizarlas buscar los apoyos necesarios, afectivos o profesionales –Amigos, familia y expertos, si fuera necesario-.

2. Afrontar la situación profesional con la máxima transparencia, tanto si tenemos trabajo como si no. Si lo tenemos, analizar nuestras posibilidades dentro y fuera de la empresa, así como la sensación que nos produce visualizarnos en ella a medio, largo plazo. Elegir si salimos o entramos y empezar a actuar en consecuencia. En caso de dificultades legales o estresores laborales –mobbing, burnout u otros- acudir a expertos en la especialidad que sea necesario.

3. Asumir nuestros plazos de respuesta y dar tiempo a que las cosas ocurran según las acciones a emprender, de las cuales la primera es cuidar la salud. A continuación, se requerirá un análisis de nuestra situación económica y de las opciones a nuestro alcance para  solventar posibles urgencias o dificultades en ese sentido.

4. Planificar un calendario de acciones, teniendo en cuenta nuestras opciones. Utilizar el tiempo de que disponemos al servicio de nuestra transición, evitando victimizarnos o dejarnos llevar por los miedos o creencias limitantes. Si no disponemos de él, plantearnos el objetivo más factible a corto plazo pero sin condicionar el futuro que deseamos.

5. No sacrificar nuestros objetivos. En caso de decidir tomarnos un período sabáticode reflexión, o tomar la decisión de realizar un proceso de transición profesional, darnos permiso para disfrutarlo sin culpabilizarnos. En caso de plantearnos un Plan B, ser cuidadosos y elegirlo de manera que no ocupe todo nuestro tiempo o energía, dejando espacio para que nuestro objetivo sostenible pueda irse configurando.

6. Reflexionar sobre nosotros y nuestro propósito de vida, y en la forma en que queremos recorrer la distancia entre ambos. En el planteamiento del objetivo, es importante pensar en grande y sin limitaciones prácticas, validando aficiones, sueños postergados y vocaciones ocultas, si los hubiese. También es necesario valorar su encaje con el resto de aspectos importantes de nuestra vida.

7. Estudiar la situación de mercado, el entorno económico y las nuevas tendencias empresariales y tecnológicas (empleabilidad). Definir la estrategia para que nuestro objetivo pueda tener éxito en ese contexto y diseñar la campaña de comunicación adecuada para conseguirlo.

8. Visualizar lo que queremos y evitar los pensamientos que no nos ayudan a avanzar. Asumir que no será un camino fácil y que habrán días buenos y malos, que todo ello forma parte de un proceso que vale la pena.  Los momentos malos irán pasando, sobretodo si no nos dejamos llevar por creencias no contrastadas sobre la búsqueda de empleo, que están en boca de todos como si se tratara de «leyendas urbanas»:  es mejor encontrar trabajo cuando ya tienes, así que es importante trabajar en lo que sea cuanto antes… es difícil encontrar trabajo a partir de los 40 años… para cambiar de perfil hay que estar dispuesto a cobrar menos… tengo que conformarme porque tengo un trabajo estable, aunque esté sufriendo algún tipo de estresor laboral… Pensar  así no sólo no te ayuda, sino que limita tu perspectiva.

9. Fluir en nuestro tránsito hacia el nuevo proyecto y comprometernos con él, enfocarnos en acciones diarias que guarden coherencia con nuestros valores y estrategia, utilizando el pensamiento lateral y la conexión con el presente para incorporar las nuevas formas que pueda adoptar nuestro objetivo.

10. Perseverar en nuestro propósito, sin dejar de creer jamás. En este punto, me gustaría hacer referencia a una frase de Alex Rovira; «El pensamiento precede al acontecimiento y si te empeñas, ganas siempre.” Además, el autor preconiza que la transformación sólo se produce cuando se juntan imaginación y deseo, y que se compone de los siguientes elementos:

FACTORES DE REINVENCIÓN

 Y añade que no es un modelo compensatorio, es decir, se requieren los cuatro elementos para que la transformación ocurra, ya que ninguno de ellos puede suplir al resto. Un modelo que no sólo me parece acertado, sino también muy útil para revisar lo que está fallando en momentos de desaliento.

Estos son sólo algunos consejos para empezar a recorrer el camino, aunque reinventarse es buscar una piedra filosofal que es diferente para cada cual y por lo tanto, requiere de autodescubrimiento. Por eso, éstos son sólo los primeros pasos que os conducen a la inmersión en vuestro propio proceso de reinvención. Por mi parte, he tenido ocasión de hacerlo varias veces y puedo decir que siempre refuerza. La primera vez, hice un cambio radical de profesión y mi mayor acierto fue saberme rodear del apoyo necesario y buenos profesionales, además de tomarme mi tiempo y de realizar un período sabáticoaunque éste no es un requisito indispensable para reinventarse y existen otros caminos para conseguirlo. Esa primera vez fue un proceso lento y completo, muy diferente al que he realizado en posteriores ocasiones, en las que el acierto estuvo en poner en práctica lo aprendido, dejar fluir las emociones y avanzar con desapego, sin demoras, con la mirada puesta en el propósito vocacional intacto y consciente de que es posible repetir el proceso tantas veces como haga falta, en mi caso, revisando el modelo de negocio.

Por cierto, que comprobé que lo de la resiliencia es verdad y ¡a partir de la segunda vez es mucho más fácil! Por eso, he hecho una infografía de Reinvención ONLINE que te puede resultar muy útil para la búsqueda de tu propia piedra filosofal.

Etiquetas: , ,

16 Respuestas de "¿Cómo me puedo reinventar? ¿Y en qué?"

  • Jenifer L. Johnson dice:
  • admin dice:
  • MPN dice:
  • Carme Brit dice:
  • admin dice:
  • odile dice:
  • admin dice:
  • miguel dice:
  • María-José dice:
  • Daniel dice:
  • María-José dice:
  • francisco tomas dice:
  • Barbara dice:
  • María-José dice:
  • JORGE dice:
  • María-José dice:
Publicar Comentario